Con el arranque de las campañas comenzó el juego del ajedrez político y pronto se verán su efectos en el DF. Nos comentan que las últimas mediciones del PRD en la Ciudad de México han comenzado a preocupar a muchos, pues sienten que de las 14 delegaciones que históricamente han tenido pueden perder algunas. Varios perredistas, nos dicen, planean mover sus piezas en el tablero y buscarán concretar un acuerdo de facto con el Movimiento de Regeneración Nacional, de Andrés Manuel López Obrador, en la lógica de mejor entregar las demarcaciones a “enemigos conocidos, que a los que están por conocer”. Bajo esa idea, y si los números finales siguen achicando las aspiraciones en delegaciones como Cuauhtémoc o Iztapalapa, varias tribus estarían buscando a Ricardo Monreal o a Clara Brugada para “pactar la mejor salida para la izquierda capitalina”.
Van por ‘Chuchos’ y ‘Bejaranos’
Ante los problemas que viven candidatos cercanos a la corriente de Los Chuchos y los que arrastran los relacionados con René Bejarano en la capital, la corriente Foro Nuevo Sol, que encabezan Amalia García y Víctor Romo, busca reposicionarse. Nos aseguran que esta tribu intentará pelear por la coordinación de la Asamblea Legislativa, así como por la delegación Miguel Hidalgo y puestos en Coyoacán, este último espacio, dominado por Chuchos y bejaranistas.
Se solicitan candidatos
Con el pretexto de buscar candidatos ciudadanos, el nuevo Partido Encuentro Social (PES) utilizó sus spots de radio para colocar una especie de aviso de ocasión. “Estamos buscando candidatos ¿te interesa?” dice en el mensaje el actor Alejandro Camacho, reclutado en las filas del PES. “Quiero ser candidato de un partido que pertenece a la voz de los que no tenemos voz”. En la versión que será difundida en televisión, el PES presenta al propio Camacho, al doctor naturista Abel Cruz y a la medallista paralímpica Dora Elia García como sus abanderados estrella a diputados.
Alerta en la Judicatura
Empleados del Poder Judicial ven con preocupación el regreso a uno de los puestos de mayor importancia y confianza dentro del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) a un funcionario que renunció hace algún tiempo a esa institución. La angustia, nos explican, responde a que el funcionario, quien hace algunos años ocupaba una dirección general, renunció al Consejo como parte de una operación quirúrgica para evitar escándalos luego de que una empleada lo denunció por acoso sexual. Lo lamentable, nos dicen, es que hoy la mujer que lo denunció, y de quien se reserva su nombre por obvias razones, trabaja en la misma área a la que ahora llegó el funcionario, incluso con un puesto superior al que tenía con anterioridad. Un caso que, sin duda, merece ser analizado por el Poder Judicial, que encabeza el ministro Luis María Aguilar.
