Juan Acuesta Rodríguez
Desde hace ya unos meses, ha existido un conflicto en la Colonia México por una gasolinera que se construyó en una avenida, en la cual se han involucrado los colonos de esa zona, el Tribunal de Justicia Electoral y Administrativa, el Ayuntamiento de Mérida y hasta la Policía Municipal, que se vio implicada en un zafarrancho el jueves 5 de junio.
Considero que es mucho el escándalo que se ha hecho por una gasolinera más en esta ciudad, que a todas luces resulta un hecho que violenta las leyes, puesto que está plenamente establecido que ninguna gasolinera se debe instalar en zonas habitacionales, pero si se recuerda, éstas se han instalado a vista y paciencia de todas las autoridades, principalmente de las municipales, lo que se ha hecho una costumbre y un hecho que no quiero pensar sea lucrativo para las altas autoridades del Ayuntamiento, pues ultimadamente son ellas las que autorizan o no estos establecimientos (por mencionar algunas, la del Arco y Jardines de Mérida, que incluso está contra esquina de una escuela primaria; la de la Avenida Correa Rachó, la de la colonia Chuburná de Hidalgo; las dos que están en Pedregales de Tanlum, de las cuales en una existe un cenote, y esta se aprobó en una de las administraciones de Ana Rosa Payán; la de la Avenida Jacinto Can Ek y muchas más que no acabaría de mencionarlas)
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Discusión entre el jefe de la Policía Municipal, Mario Romero Escalante, y Alejandro Vázquez Favela, representante legal de la gasolinera, durante la zacapela del jueves. (foto JMRM) |
Por lo dicho, es el Ayuntamiento el que otorga los permisos. En el caso de la Colonia México, existe un fallo del Tribunal, pero este ordenamiento indica claramente que el terreno es propicio para una zona comercial. No indica que sea para una gasolinera.