lunes, 17 de noviembre de 2014

noviembre 17, 2014
MOSCÚ, 17 de noviembre.- Puede que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, parezca haber dejado la cumbre del Grupo G-20 del fin de semana pasado con el rabo entre las piernas, luego de ser ampliamente criticado por la crisis en Ucrania.

Pero en Rusia el evento fue visto de otra manera, dado que los medios elogiaron a Putin por ser lo suficientemente valiente como para "entrar a la cueva del león", defenderse de las críticas y proteger los intereses nacionales del país.

Precipitada salida de Australia la de Vladimir Putin, presidente de Rusia. (Getty Images)

La televisión estatal dijo que a Putin le fue mejor en el G-20 de lo que pronosticaron los medios occidentales y que el presidente estadounidense, Barack Obama, fue quien quedó aislado en las dos cumbres que se realizaron la semana pasada.


Un periodista, Dmitry Kiselyov, dijo que la visión "unipolar" de Estados Unidos respecto al mundo claramante estaba muerta y se preguntó si es que el objetivo de Obama era destruir a Rusia.

"Putin se comportó con una sangre fría inusual: no actuó de la forma en que lo habían sugerido los comentaristas histéricos, elogió a los organizadores de la cumbre del G-20 y describió el foro como 'constructivo'", escribió el diario Izvestia, que suele favorecer al mandatario ruso.

"La principal razón de su tranquilidad es que el presidente ruso se dio cuenta de que Estados Unidos, pese a los esfuerzos del Gobierno actual, está llevando al barco de la civilización occidental hacia un precipicio llamado China y no puede cambiar el curso", aseveró.

Ya sea que Obama o Putin hayan o no destacado de la cumbre del G-20 en Brisbane y en el encuentro de naciones del Asia-Pacífico, una cosa parece clara: cualquiera que piense que el líder ruso cambiará de parecer en torno a Ucrania está equivocado.

No existen señales de que Putin haya cambiado de estrategia y la decisión de la Unión Europea de no endurecer las sanciones contra Rusia el lunes posiblemente será considerada en Moscú como una victoria para el presidente.

El comentarista político Georgy Satarov, un ex asesor político del fallecido presidente Boris Yeltsin, dijo que Putin prácticamente había desairado a las potencias de Occidente al abandonar anticipadamente la cumbre del G-20.

"Creo que en ese caso se trata de una señal de que Putin planea comportarse en Ucrania como cree que es necesario, no de la forma en que lo esperan los líderes del G-20", declaró.

Próximos pasos en Ucrania

Putin ha buscado mantener al mundo adivinando cada uno de sus movimientos en la crisis de Ucrania, pero uno de sus objetivos principales desde el comienzo parece ser evitar que el país de 46 millones de habitantes se aleje de la órbita de influencia de Moscú y se acerque a Europa Occidental.

"Ucrania es un Estado soberano, independiente y libre", dijo Putin en una entrevista transmitida el lunes. Voy a decir algo que a algunas personas en este país podría no gustarles. Tratemos de lograr un sólo espacio político en esos territorios", aseveró.

El próximo paso en la crisis podría ser una renegociación del acuerdo de cese al fuego en el este de Ucrania que fue sellado en la capital bielorrusia, Minsk, el 5 de septiembre.

Putin dijo que había problemas de implementación del acuerdo e hizo un llamado al diálogo. Agregó que los rebeldes habían ido demasiado lejos, por lo que el pacto de tregua debía ser revisado.

(Reporte de Timothy Heritage. Editado en español por Marion Giraldo para Reuters)