lunes, 6 de octubre de 2014

octubre 06, 2014
Ermilo Castilla Roche

Querido Genaro:

Mi amor, sólo quiero informarte y dejar constancia que este sábado, 4 de Octubre, como todos los sábados anteriores, acudí al Centro de Convivencia Familiar (CADI) con la finalidad de poder convivir contigo.


Quien tiene la obligación de obedecer lo estipulado por la Jueza del Juzgado Tercero de Oralidad Familiar del Poder Judicial del Estado de Yucatan de llevarte todos los sábados de 10:00 a.m. a 1:00 p.m., no lo hizo.

Desgraciadamente o volvió a actuar como si estuviese por encima de la ley, o carente de toda moralidad y ética volvió a presentar algún "justificante medico” como los que les entrego el Dr. EMM.

Estoy enterado que este miércoles, 8 de octubre, tienes una audiencia con la Jueza del Juzgado Tercero de Oralidad Familiar del Poder Judicial del Estado de Yucatán para escuchar tu opinión respecto al Régimen de Convivencia Familiar que forma parte de la demanda de Divorcio sin Causal que presentaron.

Me da muchísimo dolor que hayan pasado más de 15 meses que de manera inhumana, insensata y sin fundamento legal, no haya podido yo, ni comunicarme contigo, ni acercarme a ti, ni convivir contigo, ya que todos mis intentos fueron atrozmente bloqueados por los guaruras y agentes de seguridad de Bepensa Personal.

Me pregunto qué tanta objetividad puede tener una entrevista que te realice una Jueza de lo Familiar respecto a tu relación y tus sentimientos para con tu papá y tus hermanos mayores cuando en los últimos 15 meses, de manera ilegal, no se te ha permitido ni hablar, ni verlos, ni convivir con nosotros.

Reitero que nadie, por más recursos, poder o influencia podrá estar por encima de la ley.

Te envío la foto que me tomé este sábado en el Centro de Convivencia Familiar (CADI) en donde de nueva cuenta me quedé esperando que te llevasen.

Te amo con todo mi corazón,
Papá