lunes, 1 de septiembre de 2014

septiembre 01, 2014
Lucy Veritas

Hoy, 1 de septiembre de 2014, se cumplen 30 años de Autonomía en la UADY. Fecha que debería ser de júbilo y celebración. Sin embargo, la tristeza, el desencanto, la frustración, el enojo y la indignación son algunos de los sentimientos negativos que cunden entre la comunidad universitaria y la sociedad en general, debido a la Ley Mordaza, el doble discurso y el clima de amenazas y terror que ha impuesto el rector Dájer. Como muestra, acá van algunos "botones":

La reportera Evelyn Mendoza, del diario local Milenio, ha intentado infructuosamente entrevistar a los integrantes del consejo universitario para que opinen sobre el proceso de cambio de rector que se realizará el próximo mes de noviembre. A pesar de su insistencia desde hace un par de meses, hasta ahora nadie ha aceptado la invitación a manifestar su opinión sobre un proceso que debería ser totalmente transparente, pues es de suma importancia para la sociedad en general y no sólo para los universitarios de la UADY. La Ley Mordaza impuesta por el rector Dájer es tan "convincente" que, seguramente, ninguno de esos actores reconocerá que le han prohibido hablar sobre este tema. ¡Baldón para todos ellos! 

Develación de una placa con motivo del 30 aniversario de la Autonomía Universitaria (foto: Gobierno del Estado)

En reunión con los consejeros maestros, realizada apenas el 21 de agosto, a pesar de que se la solicitaron desde fines de mayo, el rector Dájer "les sugirió" cómo va a ser el proceso de elección para el cambió de rector. Se presentó con una agenda ya establecida, la suya, sobre qué, cómo, cuándo y cuánto se "vale". Una por una fue descalificando las propuestas de los consejeros maestros. Llegó a tal grado su prepotencia que, cuando algunos sugirieron que las propuestas de los aspirantes a la rectoría se presentaran en el formato de debate, les respondió: "son chingaderas, no sirve para nada". Qué poca memoria tiene el rector, pues apenas tres días antes, el 18 de agosto, había declarado en la Facultad de Arquitectura: "Debate, ejercicio que deberíamos practicar más" (ver boletín de la UADY del 18 de agosto y las notas de prensa del 19 de agosto). Más que falta de memoria, es una manifestación más del doble discurso que siempre ha caracterizado al actual rector y que además, en esta ocasión, lo motiva otro propósito: proteger a su delfín de hacer el ridículo ante la comunidad universitaria.

Es de todos conocido que aun entre los colaboradores cercanos del rector son frecuentes las bromas sobre la falta de recursos del delfín que quiere imponer, incluida su incapacidad para debatir. Quien haya interactuado con tal sujeto podrá constatar que sus argumentos académicos son sumamente limitados, pues durante su trayectoria en la UADY sólo ha cultivado el músculo y no la mente.

Señor rector, no sea usted hipócrita. Si aunque tardíamente ha reconocido que verdaderamente hace falta debatir en la UADY, ésta es la oportunidad para que usted demuestre que todavía le importa un poco la UADY, y su discurso sea congruente con su quehacer.

Otro botón. Hace un par de semanas el rector se reunió con algunos consejeros alumnos , los afiliados a la NFU, para comentarles sobre el proceso de cambio para la rectoría. Para evitar represalias, nos abstenemos de comentar sobre las opiniones que esos jóvenes han compartido con nosotros. Ahora bien, algunas preguntas que se hace la comunidad universitaria son: ¿Por qué no incluyó en esa reunión a los consejeros alumnos de la FEDY? ¿Por qué no incluyó a los presidentes de las sociedades de alumnos, tanto de la NFU como de la FEDY? ¿Qué lleva al rector a actuar de esa manera? ¿Acaso está siguiendo la estrategia de "divide y vencerás"? Señor rector, si algo ha caracterizado a su gestión esto es la falta de transparencia, particularmente sobre cómo usted se conduce y sobre las finanzas de la UADY.

El botón más reciente: La ceremonia conmemorativa del 30º Aniversario de la Autonomía de la UADY, celebrada este sábado 30 de agosto en el edificio central de la UADY. Para quienes conocemos la historia de la UADY fue triste escuchar el discurso del orador oficial, quien evidenció su querencia política y dirigió sus loas a los gobernantes Carrillo Puerto y Cervera Pacheco, particularmente hacia el primero (ver boletín de la UADY del 31). Minimizó, hasta donde la prudencia marcaba, el rol de quien con liderazgo fue gestor de la autonomía universitaria el 1 de septiembre de 1984, el Ing. Álvaro Mimenza Cuevas. Que quede claro que el mérito de los gobernadores Carrillo Puerto y Cervera Pacheco es innegable e indiscutible, la sociedad yucateca así lo reconoce, no sólo la comunidad universitaria. Uno de hecho y el otro de derecho son quienes reconocen la autonomía de nuestra querida Universidad Autónoma de Yucatán.

Para algunos de nosotros no pasó desapercibido que el rector departió en la misma mesa con el ex-rector Mimenza Cuevas. Sin duda, es muy bueno para y en la simulación. Pero, ¿hasta cuándo, señor rector, dejará de descalificar al Ing. Mimenza Cuevas, como habitualmente hace con su círculo cercano de colaboradores? Una vez más le reiteramos: ¡deje de ser hipócrita!, ya nadie en la UADY cree sus mentiras. ¿Sabe usted qué le pasa a los mentirosos? Les crece la nariz, pero más aun su desvergüenza.

Escuche bien y que le quede claro, señor rector: ¡Los universitarios comprometidos haremos lo necesario para que la Autonomía en la UADY vuelva a ser la que rija su diario quehacer! ¡No más Ley Mordaza y doble discurso en la UADY!

N. de la R: Recomendamos leer también el artículo Yo Soy Uady (III).