sábado, 19 de julio de 2014

julio 19, 2014
MADRID, 19 de julio.- "No sabemos el nombre y la nacionalidad del niño. Tal vez sea de los Países Bajos, puede que de Malasia, puede que de Estados Unidos. Nadie puede imaginar el horror que experimentó antes de su muerte, cayendo desde una altura de varios kilómetros. Esperemos que durmiera en brazos de su madre y que no se despertara hasta que murió por la colisión contra suelo. La muerte de este bebé está en tu conciencia, en la conciencia de Putin, que nutre a los terroristas que pisotean nuestra tierra ucraniana hasta hace poco pacífica! Maldito seas por siempre!". Estas duras palabras no las pronuncia otro que el asesor del Gobierno ucraniano, Anton Gerashchenko, presente en el lugar en el que cayó el vuelo MH17.

Foto subida a Facebook por Anton Gerashchenko, asesor del Gobierno ucraniano.

Junto a ellas, Gerashchenko colgaba en su perfil de Facebook la imagen del cadáver de uno de los bebés que viajaban a bordo del vuelo de Malaysian Airlines abatido, según las primeras investigaciones, por un misil que habría sido lanzado desde la zona de los rebeldes prorrusos, tal y como ha comunicado el gobierno de EEUU.

Las acusaciones, ataques y críticas entre Kiev y Moscú han sido constantes desde que se conociera el ataque."Pensé mucho en publicar la imagen o no. Y, sin embargo decidí publicar! Que todo el mundo vea a lo que lleva la política de apaciguamiento!", explicó Gerashchenko.

En Occidente existe una creciente preocupación sobre si el Kremlin está obstaculizando la investigación sobre la tragedia, y por otro lado, por el cada vez más beligerante lenguaje de Ucrania que hará que sea aún más difícil saber si realmente el avión fue abatido por un misil.

Mientras Ucrania acusa a los separatistas rusos y a Putin, Rusia asegura que la responsabilidad de la caída del avión es de Kiev. El presidente ruso ha subrayado que el incidente no hubiese tenido lugar si en el este de Ucrania no reinara la guerra.

En su opinión, lo sucedido con el avión malasio "es una excusa más para aprobar nuevas sanciones contra Rusia. La política de EEUU y la Unión Europea va dirigida a lograr una mayor escalada del conflicto en Ucrania, con el objetivo final de arrastrar a Rusia a una acción militar directa".

Con todo, Rusia ha pedido al gobierno ucraniano que haga pública la información sobre el sistema antiaéreo que tiene desplegado en la zona en conflicto del país. Ucrania debe explicar en detalle como utiliza sus misiles ante una comisión de investigación, dijo el ministro de Defensa ruso, Anatoli Antonov, en declaraciones al canal de televisión Rossija-24. "La comunidad internacional lo está esperando", afirmó.

Los rebeldes de Donetsk, por su parte, han negado su participación en el derribo del avión, y se han erigido en custodios de los restos del aparato y los restos de sus ocupantes, esparcidos por decenas de kilómetros en esa región, y han garantizado el acceso a observadores y especialistas.

Las potencias occidentales culpan, al igual que Kiev, a los rebeldes prorrusos del supuesto derribo y, de forma indirecta, responsabilizaron también a Rusia de la tragedia por prestar apoyo a los separatistas. El embajador británico, Mark Lyall Grant, por ejemplo, ha denunciado que Rusia ha suministrado "sistemáticamente" armas, equipamiento y apoyo logístico a los sublevados del este de Ucrania.

A la espera de que pueda realizarse una investigación objetiva e imparcial sobre las causas del siniestro del vuelo MH17 que el Consejo de Seguridad de la ONU y varios países han pedido, numerosos interrogantes envuelven el suceso y la guerra de propaganda entre las partes enfrentadas se ha sumado a las hostilidades sobre el terreno.

Sólo un detallado análisis técnico podrá determinar quién empleó ese sistema de defensa antiaérea "Buk" fabricado por la empresa rusa Almaz-Antéi, incluida esta semana en las nuevas sanciones adoptadas por Washington contra compañías del sector estatal ruso por el conflicto en Ucrania. (El Mundo)