lunes, 5 de mayo de 2014

mayo 05, 2014
Armando "Catón" Fuentes Aguirre

Aviso importante. Al final de esta columna viene un chascarrillo prohibido de consuno por la moral y la ética. Lo leyó doña Tebaida Tridua, presidenta ad vitam interina de la Pía Sociedad de Sociedades Pías, y sufrió un accidente súbito de forúnculos escalariformes que hubo de serle tratado con ungüento de atutía, sustancia medicamentosa hecha a base de óxido de zinc. Las personas que no tengan en su casa ungüento de atutía deben abstenerse de leer ese vitando cuento... Un mexicano fue a Las Vegas y ganó 100 mil dólares en la ruleta. Lo vio ganar otro mexicano que acababa de perder todo lo que traía. "¿A qué atribuyes tu buena suerte?" -le preguntó. Respondió el ganador: "En México, antes de tomar el avión a Las Vegas, llego siempre a una iglesia y rezo pidiendo que me vaya bien en la ruleta. Eso jamás me falla: siempre gano". Pasó un tiempo, y los dos se volvieron a encontrar en Las Vegas. El que había ganado aquella vez volvió a ganar; el que había perdido volvió a perder de nuevo. Le dijo al otro: "Hice lo que me aconsejaste: antes de tomar el avión fui a una iglesia y recé con mucha devoción para pedir que me fuera bien en la ruleta. Y sin embargo perdí otra vez". El otro le preguntó: "¿A qué iglesia fuiste?". Responde el perdedor: "A la de San Crispín". "Con razón te fue mal -le dice el amigo-. Debiste ir a la iglesia de Santa Priscila, que es para ganar en la ruleta. San Crispín es para los dados"... Manifestó Babalucas: "Si tanta gente ha visto platillos voladores ¿cómo es que nadie ha visto jamás las tazas?"... Un individuo iba manejando con exceso de velocidad y lo detuvo un patrullero. Preguntó el oficial: "¿Por qué va tan aprisa?". Respondió el tipo: "Estoy enfermo". El patrullero vio en el asiento trasero un equipo de golf. Volvió a preguntar, suspicaz: "¿Qué no va a jugar golf?". Replicó el individuo: "¿Y acaso el golf no es una enfermedad?"... Dale a un hombre un pescado y comerá un día. Enséñalo a pescar y se pasará todos los días sentado en una lancha y tomando cerveza... El cirujano le informó a su paciente: "Le tengo dos noticias: una mala y una buena. La mala es que al estarlo operando se me resbaló el bisturí y le corté los testículos. La buena es que  los dos estaban sanos". Aquella azafata tenía tratos íntimos con tantos pilotos que se puso luces de aterrizaje en el estómago... Un mexicano ganó el Óscar. Una mexicana ganó el Premio Cervantes. Diversos deportistas de México han ganado últimamente preseas importantes. Un jockey de origen mexicano acaba de ganar el Derby de Kentucky. Lo único que nos falta ahora es ganar el combate contra la pobreza, contra la inseguridad, contra la corrupción, contra la impunidad, contra las reformas que frenan la inversión, contra la deshonestidad, contra la falta de transparencia, contra la ingobernabilidad, contra los sindicatos mafiosos, contra la falta de productividad, contra la partidocracia y contra la ilegalidad... (Nota de la redacción: Ahí termina nuestro estimado colaborador su comentario político de hoy. Le faltó poner al final una palabra más: "Etcétera")... Sigue ahora la historia sicalíptica que arriba se anunció... Un hombre bien parecido, apuesto, llegó con el médico y le dijo que sentía ciertos malestares de índole prostática. El facultativo le pidió que se quitara la ropa y se pusiera en la mesa de exploraciones en posición genumaxilar. "¿Qué posición es ésa?" -preguntó el individuo. Contestó el doctor: "De rodillas, y con la barbilla apoyada en el piso". El paciente se colocó en esa incómoda -y comprometida- posición. El galeno procedió entonces a calzarse guantes de hule, y luego su puso tras de su paciente. "No te pongas nervioso, Juan -dijo-.  Debes ver esto únicamente como un examen médico". En seguida procedió a poner aceite lubricante en el dedo exploratorio. "Cálmate, Juan -repitió-. No hay razón para que te pongas así, tan inquieto y alterado". "Oiga, doctor -acotó el guapo paciente-. No estoy alterado ni inquieto, y no me llamo Juan". "Ya lo sé -replicó el facultativo sin quitar la vista de la región que iba a explorar-. Juan soy yo, y estoy bastante inquieto y alterado"... FIN. (Milenio)