miércoles, 5 de febrero de 2014

febrero 05, 2014
Historias de reportero | Carlos Loret de Mola Álvarez | 5-II-14

Los medios de comunicación y periodistas afines al ingeniero Carlos Slim, así como los diputados y senadores que en el Congreso defienden sus intereses están muy activos ahora que se negocia la “letra chiquita” de la reforma en telecomunicaciones.

Los Slim-media y la Telmex-bancada buscan generar la percepción de que Grupo Carso ha sido golpeado por dicha reforma constitucional, cuando en realidad ha sido todo lo contrario: la reforma ni tocó a las empresas del hombre más rico del mundo. De hecho, la reforma fue una gran noticia para el ingeniero: goleó a la que intenta competirle, Televisa.

Primer gol. La reforma en telecomunicaciones ordena más competencia para la televisora de Emilio Azcárraga, pues lanza tres nuevas cadenas nacionales de televisión: dos comerciales y una pública. Gran decisión. Lástima que en contraste, no determina ninguna medida concreta para generar más competencia en el mercado de la telefonía, donde Telmex-Telcel devoran el 75% del pastel.

Segundo gol. Por mandato de la reforma, Televisa perdió mil 400 millones de pesos porque quedó obligada a regalar las señales de sus canales a las empresas de televisión por cable. Antes se las vendía. Esto fue un triunfo para Dish, de la que es socio el ingeniero Carlos Slim, que ayer incluso desplegó en anuncios promocionando que ¡ya se veían los canales de Televisa en sus cajitas! En cambio, la reforma no reduce las tarifas de interconexión telefónica, que significaría competencia para Telmex y Telcel.

Tercer gol. La reforma adelanta el “apagón analógico” del 2021 al 2015. Para diciembre del próximo año quien no tenga un aparato digital ya no podrá ver la tele. Esto, de un día para otro, significa más competencia para Televisa: más canales estarán disponibles.

Además, por el “apagón”, a Azcárraga ya le tocó desembolsar importantes inversiones para adecuar sus emisiones a la nueva tecnología mandatada por la reforma: desde maquillaje más sofisticado para las actrices de telenovela (en serio, uno que cubra bien los poros que detecta la mejor definición de la pantalla) hasta millonarias antenas y transmisores.

Cuarto gol. A dos años de su operación, aún no se define si es legal —con base en su título de concesión— que Telmex tenga un canal de televisión: UNOTV. Grupo Carso se sigue oponiendo a que, como sucede cada vez más en el planeta, ya no se cobren las llamadas de larga distancia (con la tecnología de hoy, cuesta igual llamar al vecino que a Hong Kong: es como mandar un correo electrónico).

El marcador va 4-0. Parece tan abultado como el que le propinó el León (propiedad de Slim) al América (de Azcárraga) en la final más reciente del futbol mexicano.

Hasta ahora, la reforma en telecomunicaciones suena a Ley Pro-Slim.

(Como es bien conocido, trabajo en Televisa. Lo expongo porque estoy a favor de que se transparente lo que puede motivar cualquier opinión sobre el tema, como lo expuse en “Slim vs. Azcárraga… y la prensa” del pasado 8 de enero).

SACIAMORBOS

Disculpe, ¿usted es senador o Telcel-nador? ¿usted es diputada o Dish-putada?