lunes, 10 de febrero de 2014

febrero 10, 2014

Cuando el arqueólogo M. Le Plongeon, en 1886, descubrió en Chichén Itzá la escultura maya que llamó Chac Mool, fue enviado a buscarla don Juan Peón y Contreras, a la sazón director del Museo Yucateco.

A lomo de indios llegó la estatua a Izamal, y don Juan (que aunque no con los vuelos de su hermano don José, tenía su estilo poético) comunicó la noticia al Gobernador del Estado, General Palomino, por medio de la siguiente quintilla:

"Apreciado General,
hoy al apuntar el sol,
hizo su entrada triunfal
en la ciudad de Izamal,
la estatua del rey Chac-Mool".


Rodeado de sus íntimos, recibió el General el oficio, y al punto resolvieron que fuese contestado también en verso, comisionando para ello a don Joaquín Castillo Peraza, director del Diario Oficial. Don Joaquín produjo la respuesta siguiente:

"Queda impuesto el General
de que hoy al salir el sol,
la estatua del rey Chac-Mool
hizo su entrada triunfal
en la ciudad de Izamal".