Gilberto Avilez Tax
Voy en la mañana a entrevistar a Filiberto Chi Ucán, el custodio de San Isidro Labrador (o "San Is") para 2014, y me entero que no hay uno, sino dos santos: dos señores del monte que hacen crecer las milpas, jilotearlas, y que cuidan al milpero cuando éste hace sus faenas en el monte. El santo a que pertenece el gremio de Filiberto, me diría don Pablo, vino de Vigía Chico hace muchos ayeres, y el otro santo de otro gremio, vino de la lejana Colombia. El hombre, Filiberto, me pasa a su casa humilde (no “humilde casa”, es casa de pobres, don Filberto Chi es milpero, albañil y tricicletero), le digo qué es lo que pretendo, saber un poco de los gremios, platicamos, le inundo de preguntas, me responde pausado, hablamos de otros gremios ya extintos, sale al acecho la memoria de un bisabuelo suyo que fue del "partido liberal" y que estuvo saqueando los ranchos de los socialistas y se confunde esta parte de violencia política de los primeros años revolucionarios, con los recuerdos de la guerra de castas.