martes, 10 de diciembre de 2013

diciembre 10, 2013
Alejandro Abud Bujaidar

El petróleo de México ha servido para mantener una clase política obesa, una enorme y lenta burocracia, una base de contribuyentes raquítica y un pueblo pobre acostumbrado a estirar la mano. Y eso que el petróleo es de los mexicanos...

México ha utilizado el petróleo para sostener al gobierno en vez de que lo sostengan los mexicanos.

El gobierno se mal acostumbró a no planear y el mexicano a no producir.

Ahora tenemos que pagar más impuestos porque no contamos con la renta petrolera de antes pero no generamos suficiente riqueza ni tenemos una situación económica propicia para aumentar la propia renta, para generar más empleos o para pagarlos mejor.

México, los mexicanos, vivimos en la holgazanería petrolera, mal administrando la abundancia... generando generaciones perdidas.

El petróleo es una fuente de energía no renovable, algún día se acabará. ¿Esperamos a que eso suceda o nos vamos adelantando al futuro?

Esta es una oportunidad de transición. Hoy me preguntaba: quieren nuestro petróleo... ¿a cambio de qué? y llegué a una conclusión: que nos paguen la renta justa, que se lo lleven lejos y que de ahora en adelante generemos energía alternativa que nos cueste menos.

Que subsidien las celdas solares y los generadores eólicos para usos domésticos, comerciales e industriales.

Que la renta petrolera sirva para volver al campo a producir y para dar a los mexicanos un sistema digno de salud y de educación.

Que la burocracia sea la mínima necesaria.

Apoyo una reforma petrolera que le de a los mexicanos lo que el petróleo de los mexicanos nunca nos dio aunque ya no sea nuestro.

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