martes, 27 de agosto de 2013

agosto 27, 2013
CIUDAD DE MÉXICO, 27 de agosto.- Atención geriátrica especializada para personas transexuales, el derecho de las parejas homosexuales y lésbicas a que se respete su dignidad y expresiones afectivas, así como a la identidad de género, fueron las demandas puestas por la coordinadora de Personas Adultas Mayores de Prodiana AC, Fausta García Ruiz, en el Parlamento de los Sabios, organizado esta mañana por la Comisión de Grupos Vulnerables de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).


Ante diputados, autoridades del Instituto Nacional del Adulto Mayor, y personas de distintas organizaciones de adultos en madurez, la señora García Ruiz indicó que no es posible hablar de derechos para este sector sino están incluidas las necesidades específicas de las personas lesbianas, gay, bisexuales y transgénero. 

Explicó que ante la reforma al artículo primero de la Constitución, que prohíbe la discriminación, las necesidades específicas de las personas adultas mayores del colectivo lésbico, gay, bisexual, transgénero, intersexual (LGBTI) deben ser tomadas en cuenta con la misma seriedad que las de otros grupos vulnerabilizados para ser incorporadas a las políticas de atención. 

Ante el presidente de la Comisión de Grupos Vulnerables, Jorge Zepeda, del Partido de la Revolución Democrática, la integrante de Prodiana AC, señaló que se necesita que las personas transgénero adultas mayores reciban sus tarjetas de apoyo económico, sin que les sean condicionadas a una identidad oficial, que en los albergues y casas hogar se respete su identidad de género y que se desarrollen modelos de atención geriátrica que prevean los efectos de terapias de reemplazo hormonal, así como también de las modificaciones anatómicas. 

Al referirse al derecho de personas lesbianas, bisexuales, y hombres gays, expresó que es necesario respetar el derecho a la pareja, a las expresiones afectivas, y que se garantice el derecho a la atención por viudez incluso de quienes no se han casado, y cuyas relaciones sean equivalentes al concubinato. 

García Ruiz, mujer heterosexual de 75 años de edad, con nueve bisnietos, siete nietos y tres hijos, consideró injusto que a una pareja homosexual no se le permita permanecer junta al llegar a la vejez, y que se restrinja esta posibilidad solo a heterosexuales, lo cual dijo, “es un acto inhumano que debe detenerse”. 

Por último, expresó que se debe garantizar el derecho de las personas lesbianas, gays y bisexuales a acompañar a sus parejas en hospitales, sobre todo cuando se encuentran en fases graves por enfermedades crónico-degenerativas vinculadas con la edad. (Gloria Hazel Davenport Fentanes)

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