domingo, 18 de agosto de 2013

agosto 18, 2013
Parece que el gobierno se jode más al pueblo que los narcos. ¿Tú también lo piensas?
Pedro Echeverría V.

1. Andrés Manuel López Obrador calificó de pésima la decisión de detener a 45 miembros de la policía comunitaria en Aquila, Michoacán, realizada por el Ejército Mexicano y la Policía Federal; aseguró que el fuego no se combate con el fuego. (Aunque se apellide Cienfuegos) “La violencia –señala AMLO- no se resuelve con más violencia, eso quedó demostrado en el sexenio de Felipe Calderón, y Peña Nieto sigue la misma política de querer resolver los problemas por la fuerza”.

2. Lo que se observa es que parece que el pueblo y sus guardias comunitarias deben cuidarse mucho más del ejército que los encarcela y persigue que de los narcotraficantes que los amenazan. Las guardias que selecciona y elige el pueblo para cuidarlos -porque el gobierno los mantiene en el abandono- que están realizando un trabajo que debería hacer el gobierno, ahora son perseguidos y encarcelados porque están “fuera de la ley” que el mismo gobierno impone.

3. No poseo muchos ni buenos recuerdos del actuar de las “guardias rurales” en otros tiempos de la historia mexicana. Creo que se convirtieron en algo odioso para el pueblo, en guardias oficiales de represión de los gobiernos contra los campesinos rebeldes. Tampoco recuerdo en estos momentos de su relación con el ejército federal actual que al parecer nació en Teoloyucan en 1914 bajo la firma de Álvaro Obregón después de derrotar al gobierno y ejército usurpador de Victoriano Huerta.

4. No confío en que las hoy guardias comunitarias se transformen en guardias rurales con salario extendiendo así la fuerza del ejército, pero sí pienso que el gobierno debe apoyar a los pueblos para que tengan instrumentos para defenderse en este México que hoy está muy descompuesto. Si el gobierno, en vez de ayudar a los pueblos a defenderse, los sigue reprimiendo y a sus guardias encarcelándolos, estará cavando, sin darse cuenta por inexperto, su propia tumba.

5. Dado que nunca he sido defensor de ningún gobierno no me enoja que comiencen a preparar la tumba donde deben enterrarlos, pero sí me preocupa que pudiera llegar un gobierno más fascista que los que hemos tenido. En la década de los noventa escribía que ya no podía haber en México gobiernos tan lesivos para el pueblo como los del PRI, que en materia política ya habíamos tocado fondo y que cualquier cosa sería menos peor. Ni de risa pensaba en que llegara al gobierno el PAN de la extrema derecha y llegó.

6. Y así nos fue: 12 años de retroceso total, de gigantesco aumento de la miseria, el desempleo y en número de muertos. Después de 12 años el balance ha sido absolutamente negativo para la población mayoritaria del país. A parir de diciembre de 1012 nuevamente al PRI (que se dice “nuevo”) ha llegado al gobierno nacional y se inicia otro ciclo. Buscan aplicar la misma estrategia envolvente a todos los partidos y políticos; lo están logrando fácilmente con el llamado Pacto por México o contra México.

7. Por otro lado es indispensable saber: ¿Cómo se joden los narcotraficantes a los campesinos, obreros, trabajadores, amas de casa, a los niños, al pueblo? Me responden que haciéndoles fumar mota y consumir otras substancias nocivas para su salud. ¿Serán muchos millones los consumidores o sólo quienes la hemos probado para saber y no ser ignorantes? Pero dicen que además –como en Michoacán- cuando controlan una población, meten impuestos muy altos a todos.

8. A veces no creo en lo que se propaga porque, pregunto: ¿Cómo teniendo millones de pesos los narcotraficantes pueden obligar a los indígenas y campesinos a pagar impuestos sino tienen ni para comer? Pienso que los narcos saben quienes tienen propiedades y dinero acumulado en el banco, y quienes no poseen ni un petate para morir. Sigue siendo para mí una incógnita el actuar de los narcos porque se habla tan mal de ellos que los han convertido en héroes anónimos.

9. El narcotráfico, en vez de reducirse se incrementó durante el gobierno del PAN. Se mandó al ejército a ocupar al país, se dilapidaron muchos miles de millones de pesos, fueron asesinados 100 mil personas. Con el “nuevo PRI” parece que se aplica exactamente la estrategia calderonista de represión y asesinatos. Espero que la represión no se agudice para que la participación se haga más grande; si por el contrario la brutalidad del ejército y la policía se hace más cruel la estrategia de la izquierda debe cambiar radicalmente. (16/VIII/13)