sábado, 17 de agosto de 2013

agosto 17, 2013
EL CAIRO, 17 de agosto.- Fuerzas de seguridad egipcias asaltaron este sábado una mezquita en el centro de El Cairo donde se habían parapetado islamistas seguidores del depuesto presidente Mohamed Morsi, entre ellos líderes de la Hermandad Musulmana.

De acuerdo con la agencia oficial de noticias MENA, hombres armados abrieron fuego contra los militares desde el minarete de la mezquita Al-Fateh (Fatah) y las estaciones locales de tv difundieron imágenes de los soldados ripostando con fusiles de asalto.

Las fuerzas de seguridad egipcias liberaron una mezquita de El Cairo que se había convertido en el epicentro de los enfrentamientos de este sábado entre los manifestantes y los militares, reportaron  los medios de comunicación estatales.

Cientos de simpatizantes del depuesto presidente Mohamed Morsi habían tomado la céntrica mezquita al Fateh para refugiarse del asedio de las fuerzas de seguridad egipcias.

El vocero del gobierno se refirió a los manifestantes como terroristas y advirtió que "lo que vemos en las calles no será aceptado". El gobierno instó a los manifestantes simpatizantes de Morsi a "entrar en razón" y llevar a la unión de los egipcios.

Según el ministerio del Interior egipcio, más de un millar de personas fueron detenidas durante la noche del viernes 16 de agosto en todo el país y en las manifestaciones de protesta de la jornada se reportaron 173 muertos.

Medios de prensa árabes informaron que el viernes un hijo del líder espiritual de la Hermandad, Mohamen Badie, resultó muerto durante choques en los alrededores de la mezquita, y que Mohamed al-Zawahiri, hermano del cabecilla de al-Qaeda Ayman al-Zawahiri, fue arrestado por la policía este sábado.

El primer ministro interino, Hazem el-Beblawi, dijo que el nuevo gobierno trabajará “sin descanso” hasta hallar una solución democrática a la crisis pero que no lo hará con quienes recurran a la violencia.
Sin comida ni suministros médicos, pero temiendo represalias si se retiraban, los manifestantes rechazaron la petición de los militares para que abandonaran la mezquita.

Los disturbios políticos surgieron a partir del golpe militar que derrocó al Presidente Morsi, y sus seguidores han llevado a cabo manifestaciones masivas contra el gobierno interino y sus aliados. Ambas partes se acusan mutuamente de instar a la violencia.

Al interior, los partidarios de Morsi aguardaban sin que se reportaran enfrentamientos.

La situación se agravó cuando las fuerzas de seguridad dispararon al minarete (torre) de la mezquita, alegando que había francotiradores disparando contra ellos.

Un portavoz del gobierno informó a la prensa que habían sido arrestados varios extranjeros, incluidos sirios, paquistaníes y palestinos, y confiscadas grandes cantidades de municiones, cocteles molotov y armas.

El vocero dijo que hubo actos de violencia de los islamistas en 12 iglesias, dos prisiones, tiendas, el ministerio de Finanzas, la biblioteca de Alejandría y varios edificios gubernamentales. La Hermandad Musulmana dijo que las protestas convocadas el viernes en una "jornada de cólera” seguirán durante toda la semana. (Voz de América / Spiegel / CNN)