miércoles, 21 de agosto de 2013

agosto 21, 2013
MÉRIDA, Yucatán, 21 de agosto.- La Lic. Cristina Rojas Cruz, directora de Aprendiendo a Vivir Juntos y la Red Discapacidad Unidos por la Integración‏, nos ha hecho llegar un comunicado donde se acusa a la Asociación Enséñame a Caminar por la Vida (Encavi) de maltratar a menores discapacitados.

En el comunicado, Rojas Cruz recordó que a finales del mes de junio del año en curso se reunió con padres de niños discapacitados para la instalación de la Red de Discapacidad Unidos por la Integración, para brindarles la orientación necesaria con el fin de encaminar demandas de derecho a la protección del menor con discapacidad.

Los inconformes ya han presentado sus denuncias correspondientes ante la  Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia (Prodemefa), Ordenna Yucatán, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey), el DIF Estatal, la Sedesol y la Fiscalía General del Estado de Yucatán (FGE).

La asociación asegura que se han interpuesto 7 demandas y cuentan con 4 declaraciones de menores con discapacidad que corroboran los malos tratos.

La licenciada añadió que, hasta la fecha, Encavi continua con sus labores y consideran que sus actividades deben parar hasta que se demuestre su inocencia.

"Se supone que ante la señal de alarma de cada organismo a beneficio de la protección de la niñez la prioridad es proteger a nuestros menores con y sin discapacidad", señalaron en el comunicado.

Indicaron que la psicóloga Nelsy Chan y otros maestros que los niños han mencionado en sus declaraciones ya han sido citados para declarar ante las instancias competentes, pero no todos se presentaron. Agregaron que se reconoció el maltrato, asegurando que eran "terapias" "por el bien de los menores".

El pasado 30 de junio, el Diario de Yucatán publicó algunos detalles sobre el abuso descrito por los padres de los niños:

"A mi hija la sentaron en las cajas de refrescos y le vendaron los ojos, le dijeron que si no se estaba quieta se iba a caer", declaró el padre de una niña autista.

"A mi hijo le ponían unos bichos, me dijo la directora que era una terapia que estaba aplicando, pero mi hijo ya le tiene terror a los animalitos", expresó otro padre.

"Mi hijo llegaba con moretones y mordidas, pero me decían que era parte de la terapia del maestro que lo atendía. El esposo de la directora me decía que se golpeaba y él solo se hacía daño", añadió otro de los infonformes. (JMRM con información de la Red Discapacidad Unidos por la Integración‏)

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