jueves, 18 de julio de 2013

julio 18, 2013
Pedro Echeverría V.

1. Todos, toditos los partidos del mundo al nacer gritan con fuerza sus convicciones políticas e ideológicas, pero sobre todo demuestran su enorme honestidad; sin embargo, pasados unos años de crecimiento lo primero que aprenden es a acomodarse en el sistema político y económico; si no lo hacen tendrá que morir o no crecerán, como dice el darwinismo social. Miles de partidos pequeños han desaparecido y muy pocos se han acomodado, es decir, han aceptado –con remilgos o sin ellos- los reglamentos del juego que les ha impuesto la clase dominante. Puede observarse que tal como los sindicatos de trabajadores sólo nacieron para defender los derechos gremiales de ellos mismos, así los partidos tradicionales –como parte del Estado- nacieron para defender por encima de todo, el sistema económico y político.

2. El PRD (Partido de la Revolución Democrática) nació en 1989 como respuesta al fraude electoral sufrido por Cuauhtémoc Cárdenas un año antes; algunos grupos honestos sólo entraron al proyecto porque tuvieron la esperanza de izquierdizarlo; navegaron algunos años hacia ese objetivo, pero terminaron siendo absorbidos por las ofertas de privilegios de los gobiernos, o muertos los más ilusos. En una ocasión, en un congreso de Oaxtepec, se llegó a ganar que el PRD se declarara “de izquierda”; pero resultó sólo una concesión de la derecha que en la práctica se estaba apropiado del partido. El PRD tuvo un fuerte impulso cuando Cárdenas logró el gobierno del DF en 1997 y en la lucha por la Presidencia de López Obrador en 2006. Después la derecha representada por “los chuchos” lo entregó al gobierno de Felipe Calderón.

3. Hoy el PRI, el PAN, el PRD, son cascarones políticos gobernados o dirigidos por mafias que mantienen un fuerte apoyo del Estado para hacer los trabajos de control que realizan con mucha efectividad. No cuentan con base social ni realizan trabajo político, pero el llamado “Pacto por México” aunque parece ridículo no lo es, porque cumple con su papel de gran mediatizador. Hoy, aunque parezca caricatura ver desesperado al PRD colgándose de las patotas del PRI y del cuello del PAN -que también es ayudado por el PRI para no derrumbarse- debe reconocerse que con ello han terminado por replegar, debilitar o desaparecer a la poca oposición que había: lopezobradorismo, zapatismo, electricistas, mineros, Congreso Social, pequeños grupos de izquierda, dejando siempre solos en la batalla a la Coordinadora (la CNTE).

4. Ayer andaba por Campeche, Champotón, Ciudad del Carmen, conversando con mis amigos profesores de la Universidad Pedagógica (Mario Martín), (Juan Cobos, de la Prepa) para conocer sus inquietudes actuales. La realidad es que a pesar de sus búsquedas personales pensando en una educación cercana a la gente, realizan actividades buscando cambios radicales en este país que parece haber sido entregado a los grandes empresarios y a las empresas radiotelevisivas. Quizá debí desviar la ruta para solidarizarme con los compañeros profesores de Chetumal que realizan una gran huelga de hambre de siete días, pero no lo hice. Obviamente mis amigos son gentes de oposición que, aunque en estos momentos no están en la lucha social en las calles, no tardan en manifestarse contra la situación que se vive en el país.

5. El PRD y el PAN se derrumbaron en las pasadas elecciones y el PRI siguió caminando hacia la recuperación de su antiguo poder acompañado por los medios de información fuertemente subsidiados. El PRI –a pesar de haber entregado Baja California al PAN- ha acusado a los otros partidos (PAN-PRD) de fuertes chantajes por salirse del “Pacto” si no les dan lo que piden. Por su parte un fuerte grupo priístas “receloso” exige que el PRI deje de entregar privilegios al PAN y al PRD. Aunque en la izquierda estemos deseando que los tres partidos se rompan –porque al fin sólo representan a sus dirigentes- la realidad es que el gobierno de Peña Nieto busca que esos partidos estén fuertes para que le sigan sirviendo como instrumento idóneo para hablar de democracia. Al pueblo no le interesa o está escasamente informado de los miles de millones de pesos que usa el gobierno para mantener este “juego de democracia”.

6. Cuando nació el PRI en 1929 se dijo que sería el instrumento de la Revolución Mexicana para cumplir con las promesas de la revolución; por ello siempre han dicho que “la revolución sigue adelante”. Cuando nació el PAN en 1939 se dijo que era para luchar contra el comunismo de Cárdenas, las expropiaciones de tierras, del petróleo y por la defensa de la propiedad privada; lo ha cumplido en parte. Cuando nació el PRD en 1989 se dijo que lucharía contra la derecha del PAN y del PRI, pero terminó asimilándose a los dos. Ninguno de los tres partidos dejó de decir que luchaba a favor del pueblo y hoy ninguno puede negar que nada ha hecho por el pueblo porque ha tenido que acomodarse al dominio de la clase dominante. Así terminan –si no quieres desaparecer- todos los partidos: acomodándose al sistema de dominación. ¿Qué hacer ante esa realidad? (18/VII/13)