domingo, 16 de junio de 2013

junio 16, 2013
ESTAMBUL, Turquía, 16 de junio.- El primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha justificado este domingo, durante un mitin en Estambul ante decenas de miles de partidarios del AKP, la actuación policial para desalojar la plaza Taksim y el parque Gezi y ha pedido a los ciudadanos que no vuelvan a manifestarse. Esta llamada es un aviso a las varias marchas que este domingo intentan alcanzar la plaza Taksim, epicentro de las protestas y que este domingo ha amanecido bloqueada por las fuerzas del orden. Al mismo tiempo, dos de los mayores sindicatos del país han llamado a iniciar a partir del lunes una huelga general. 

“Desalojar el parque es mi deber como primer ministro. Si no lo hago, no debería seguir en este puesto. En Europa dicen que [las protestas] eran un asunto sobre la libertad. ¿Qué libertad? La libertad debería estar dentro de la ley. Querían poner tiendas de campaña en el parque de Gezi. Si quieres poner una tienda de campaña, vete al campo”, dijo Erdogan ante una multitud de seguidores del gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, en sus siglas en turco), en el poder desde 2002. (Reuters)
Cañonazos de agua a los manifestantes anti-Erdogan en el Parque Gezi, contigo a la Plaza Taksim. (AP / DPA)

Tras más de dos semanas de protestas contra la violencia policial y el Gobierno, Estambul y Turquía parecen estar cada vez más divididas. El primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, arengó este domingo a cientos de miles de seguidores en Estambul mientras, al mismo tiempo, en el centro de la ciudad la policía usaba lanzaba una vez más gas lacrimógeno para evitar que miles de manifestantes se acercaran a la plaza de Taksim, epicentro de las protestas.(AFP)

A pesar de su línea dura, el Premier recibe un gran apoyo de la población. Cientos de miles de personas lo vitorearon durante su discurso. Los críticos dicen que el presunto respaldo es por "miedo". (DPA)


La policía antidisturbios está en el centro de Estambul para evitar la toma de la Plaza Taksim por los manifestanres. A la izquierda de la foto se ve a un vendedor de pretzels. (AP / DPA)
Casi al mismo tiempo que Erdogan arengaba a sus huestes, la policía seguía usando gas lacrimógeno para evitar que miles de personas se aproximaran a la zona de Taksim y el parque de Gezi, que los agentes habían acordonado con miles de agentes. El ministro de Asuntos europeos, Egemen Bagis, llegó a decir que quienes acudieran a protestar a Taksim serían tratados como terroristas.

"Apelo al sentido común de la población", ha señalado Erdogan que ha justificado el desalojo afirmando que sus ocupantes insistían en quedarse en la plaza y ha insistido que era su "deber" "limpiar" el que ha sido centro de las protestas antigubernamentales que sacuden el país por el proyecto de reurbanizar el parque Gezi. "Esto es un proyecto para desestabilizar Turquía. Pero no podrán, no os han tenido en cuenta a vosotros, la mayoría silenciosa", ha señalado el primer ministro.

Erdogan también ha aprovechado para defenderse de las acusaciones de brutalidad policial, que le ha recriminado el Consejo de Europa. "Antes de nosotros, la policía podía usar la fuerza sin ningún limite. Nosotros vinimos y lo restringimos", ha recordado sobre la gestión de su partido, en el poder desde hace once años. Además, ha asegurado que bajo su mandato se han acabado los malos tratos en prisiones y comisarias y se han levantado las limitaciones a la libertad de expresión y manifestación.

Convocatoria de huelga general

Ajenos a las explicaciones del primer ministro, dos de los principales sindicatos de Turquía han anunciado la convocatoria de una huelga general en todo el país a partir de este lunes. El paro busca denunciar la violencia policial contra los manifestantes, según ha explicado Baki Cinar, portavoz del sindicato KESK.
Zuma Press actualiza la información y dice que son cico sindicatos que agrupan a 860,000 trabajadores los que convocan a la huelga mañana.

"Vamos a la huelga este lunes en todo el país, con el sindicato DISK y con otras organizaciones", ha confirmado Cinar. Médicos, ingenieros, arquitectos y dentistas son algunos de los colectivos que se han sumado a la convocatoria que busca poner fin "inmediato" a la violencia policial.

El DISK (Confederación Sindical de Obreros Revolucionarios) tiene 420,000 afiliados mientras que el KESK (Confederación Sindical de Trabajadores del Sector Público) cuenta con 250,000 miembros.

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